Los eventos internos están diseñados para fomentar y potenciar los valores corporativos de una empresa, y para que entre los empleados de ésta se logre una sinergia fuera del entorno laboral y potencien el trabajo en equipo. Contar con un grupo de personas motivadas y que estén a gusto será el mejor motor de la empresa.
Steeple, empresa de software dedicada a soluciones de comunicación física y digital, ha realizado un informe con el fin de averiguar la importancia que las compañías españolas otorgan a la realización de eventos internos. El estudio dictamina que, el 75% de las empresas nacionales realizan menos de cinco eventos internos por año. Además, el 22% organiza entre 5 y 15 eventos; y solo el 3% de empresas organiza más de 15 al año. En este sentido, cabe indicar que el 65% de los citados eventos consiguen implicar a todos los centros de trabajo y empleados, mientras que solo el 35% se limitan a los trabajadores de las oficinas.
Una correcta gestión de los equipos humanos que integran las empresas es un pilar clave para lograr una mayor calidad de vida en el trabajo y un mejor ambiente laboral. Esto puede traducirse en una mejora del engagement; una disminución de la rotación y el absentismo; y un aumento en el rendimiento y la productividad.
Una de las herramientas más importantes y eficaces para lograr los objetivos es la organización de los ya nombrados eventos internos. Éstos, teniendo el mismo fin, pueden recorrer caminos diferentes gracias a sus diferentes tipos, como: Las convenciones, las reuniones, las actividades de formación y reciclaje, los viajes de incentivos o los eventos sociales. Según el informe, el 62% de los trabajadores aseguran que dichas jornadas ayudan a permanecer motivados en el trabajo.
Diferentes tipos de eventos internos
El evento interno más organizado en las empresas son las cenas de Navidad. El estudio de Steeple asegura que éste se celebra en el 73% de las compañías, pero como indica el estudio, existen diferentes opciones que ofrecen resultados muy eficientes en lo que a participación de empleados y consecución de objetivos se refiere.
Eventos de bienvenida a nuevos empleados y aniversarios de antigüedad. Son sencillos de organizar, permiten romper el hielo con los nuevos trabajadores, crear vínculos afectivos y fomentar el sentimiento de pertenencia a la empresa.
Eventos para causas sociales. Las jornadas destinadas a la concienciación en relación con la salud de los empleados o del respeto al medioambiente demuestran un fuerte compromiso social por parte de la empresa. Esto también ayuda a que los trabajadores se sientan más comprometidos con su empresa.
Acontecimientos deportivos. Pueden servir para relacionar a una empresa con valores tan importantes como el esfuerzo, la superación o el trabajo en equipo. También son válidos para estrechar y crear nuevos lazos de amistad entre los trabajadores. Además, siempre es positivo fomentar el deporte.
Convención anual. Un evento con el que actualizar información sobre resultados empresariales y analizar las estrategias de futuro. Es una opción perfecta para destacar y agradecer la labor de todos los trabajadores que componen la empresa.
Puertas abiertas. Por un lado, puede atraer nuevos candidatos a un puesto de trabajo. Por otro, puede ser una gran oportunidad de ampliar conocimientos, ofrecer una visión más completa de los diferentes departamentos de una empresa y empatizar con los compañeros.
