El tiempo es uno de los bienes más preciados. Por ello, optimizarlo y aprovecharlo suele ser sinónimo de éxito durante los viajes de negocios, ya que éste viene marcado por el rendimiento extraído de los minutos que dure el desplazamiento. Ésta es la razón por la que los viajes corporativos deben estar, en la medida de lo posible y lo lógico, programados al detalle.
Dicha planificación dará como resultado una mayor productividad, clave de los viajes de negocios. Pero no es solo una cuestión de tiempo, sino de prioridades. Ser capaz de priorizar las tareas necesarias para alcanzar los objetivos. Teniendo esta máxima presente durante la planificación del viaje, es importante saber sacarle partido a cualquier espacio y tiempo como, por ejemplo, los desplazamientos.
Consejos para optimizar el tiempo y lograr una mayor productividad
Alejarse de una agenda poco flexible. En ocasiones, la agenda de un viaje está calculada tan excesivamente que resulta contraproducente y muy poco accesible, sin dar lugar a posibles encuentros espontáneos. Aunque es importante marcarse los objetivos estratégicos en la planificación, también lo es dejar espacios disponibles para cualquier imprevisto u oportunidad que pueda surgir durante la estancia. Rechazar encuentros de interés puede causar una mala imagen.
Aprovechar el tiempo sin importar el lugar. Ya sea esperando en el aeropuerto, en un restaurante o en la habitación de un hotel, cualquier momento es bueno para aprovechar. Es probable que, en este tipo de ocasiones de esperas o traslados la infraestructura logística no sea la más adecuada para una larga jornada laboral. Sin embargo, se puede aprovechar para realizar trabajos más livianos, pero igualmente necesarios. Estas pequeñas labores permiten establecer un orden mental, además de optimizar el tiempo en el momento de comenzar a trabajar.
Anticiparse a posibles imprevistos durante el viaje. Es conveniente contar con un plan que anticipe los posibles escenarios desfavorables durante el viaje de negocios. Planificar qué hacer en términos de trabajo ante el retraso de un vuelo o la cancelación de un encuentro con un cliente garantizará optimizar ese tiempo concreto.
Más allá de los citados consejos, planificar la parte logística de un viaje ayudará también a aprovechar el tiempo durante éste. Algunos detalles como climatizar la habitación del hotel, escoger un lugar con el mobiliario apropiado, o volar teniendo en cuenta los desfases horarios y sus efectos, pueden ayudar a que el viaje corporativo se convierta en todo un éxito.