En una época en la que prácticamente cada día aparecen noticias sobre nuevas inteligencias artificiales o mundos alternativos, conviene recordar la importancia de la realidad. El ser humano está hecho para relacionarse e interactuar con otras personas en el mundo real. No cabe duda de que la mayoría de estos avances tecnológicos están ayudando ya o lo harán en el futuro, pero tampoco se puede dudar de que la mejor manera de impactar sobre otra persona es interactuando de tú a tú de manera “real”.
Cabe recalcar de nuevo que, las innovaciones están para ayudar y que su implementación es tan necesaria como práctica. Esto no quita para que en el actual contexto de búsqueda de la novedad tecnológica constante e incluso en ocasiones ansiosa, sea conveniente detenerse un instante para no olvidar el papel de la realidad. Un papel que sigue siendo clave, ya que es el mejor lugar donde el ser humano interactúa y comunica.
Metaverso
El Metaverso apareció a ojos del gran público como un ciclón. Empresas de todo el mundo decidieron invertir en una herramienta que convenció a propios y extraños de que parte de la vida humana estaba abocada a transcurrir en un mundo digital. Sin embargo, tras llegar a su punto álgido, la falta de una utilidad práctica real ha provocado que esas mismas empresas, que en su momento decidieron invertir, ahora hayan retirado su apoyo. Hoy en día, la utilidad del Metaverso en lo que a reuniones de negocios o eventos se refiere es prácticamente nulo, por las que éstos seguirán transcurriendo en el mundo real.
Realidad virtual, 3D y Realidad aumentada
Las gafas de realidad virtual hicieron acto de presencia hace ya años. Su utilización fue toda una novedad y se ha llegado incluso a comercializar para todo el público. Sin embargo, tras ese primer impacto positivo, la sensación es que se trata de una herramienta que no ha avanzado más. Su crecimiento ha sido pequeño, y el valor añadido que en su día pudo ser más claro, hoy en día no lo es tal. Es más, el mareo que provocan a algunas personas, uno de sus grandes hándicaps desde su inicio, aún sigue sin resolverse. Aunque es posible verlas en algún evento, su uso no es muy común.
En el caso del 3D se puede asimilar al de la realidad virtual. Una herramienta que al principio tuvo mucho seguimiento, sirva como ejemplo la cantidad de películas que se podían ver en el cine en 3D, pero que, al cabo del tiempo, tras pasar el factor de la novedad y sorpresa, ha caído en el olvido por su casi nulo avance.
Por su parte, la realidad aumentada parece ser una vía con más futuro. Se trata de una herramienta que cabalga entre la realidad y el mundo virtual. El acceso a imágenes dinámicas o a información a través de un dispositivo pueden tener muchas aplicaciones prácticas. Pero lo cierto es, que empresas tan tecnológicas como Apple muestra dudas al respecto de su viabilidad y utilidad. Lo que parece claro es que, en este caso, aún habrá que esperar para comprobar si la realidad aumentada termina haciéndose un hueco en el día a día de las personas o no.
Gaming
El gaming es el gran aliado de todas la tecnologías anteriores, pero hay que tener claro el engagement que permite. Una persona que decida jugar puede esté encantado de vivir la adrenalina del juego, por contra, alguien que esté trabajando o participando en una reunión puede no tener las mismas ganas, paciencia o pasión. Quien juega a juegos quiere escapar de la realidad; en un paseo por una ciudad o una reunión de trabajo, se prefiere el realismo y hablar con una persona real.